5.000 €, sí. ¿Por qué? Porque no estás contratando al panadero de la esquina, ni alguien que te habla de inversiones y te dice que todo es fácil y rápido.

Estás contratando a un tío que, honestamente, ya gana mucho dinero con sus negocios. Y que dedicarte tiempo a ti significa quitarme tiempo a mí. Y eso, querido amigo, se paga.

No contratas a un tío que tiene una Vespino, contratas a un tío que tiene un Lamborghini Huracán, un Mercedes CLS, y que se comprará un Ferrari F8 Tributo pronto. Contratas a un tío que con una enfermedad grave, trasplantado de los 2 pulmones y que se ha pasado media vida en el hospital, aun así tiene 3 casas pagadas y en propiedad.

Estás contratando a alguien VIP, y por eso pagas 5.000 €, porque los conocimientos que te voy a dar yo valen incluso mucho más que eso, y es probable que lo aumente a 10 mil al mes.

Y no te voy a decir que tengo mucha gente contratándome y bla bla para venderte la moto. Es lo que valgo y lo que cobro, si no te lo puedes permitir, no pasa nada, simplemente no contrates. Pero eso es el precio mínimo que estoy dispuesto a aceptar para ayudar a otra persona en sus negocios y ayudarla al máximo en ello.

Como dijo el Joker: “Si algo se te da bien, nunca lo hagas gratis”.

No necesito el dinero que me vas a pagar, pero por menos no voy a trabajar, es lo que quiero que entiendas. Y cuando me contrates, verás que doy el 100% contigo, y te arrepentirás de no haberme contratado antes.